martes, octubre 14, 2008

"Diccionario de amor"

¿Cuándo decidimos dejar de amar a alguien?

Es imposible no hablar de esa película, sobre todo en situcaión como esta.

Fue una de esas películas que uno sabe que le harán reflexionar y a las cuales se recomiendo no ir solo. Yo no hice caso de esa recomendación y esperé que cada uno de los cuadros empezara a salir. Y fue imposible no adecuar cada una de las cosas que iban saliendo en la gran pantalla a mi historia de amor.

Era imposible no verme reflejado en sus personajes, no sentir esa historia como mía y no avergonzarme al sentirme descubierto en mis tristezas. Fue una socialización de lo difícil que han sido estos días, de los desolantes momentos tras la partida... Una puesta en escena de los miedos, los pesares y las angustías. Un verse reflejado en el espejo como estupidos y no poder hacer cambiar la realidad.

"No podré explicarles porque los hombres se enamoran, simplemente lo hacen y ya". Y cada uno de los capítulos tuvo sus propios conclusiones. El primero creo que será parte de una historia que pronto voy a vivir, un nuevo ciclo del amor que puede empezar en cualquier momento así yo no lo esté buscando, o así diga que no lo quiero buscar. Ese día no importará cuánto tiempo ha pasado, si vale la pena estoy seguro que me juego mis harapos, pero espero no dar un paso en falso. Esta vez no quiero cometer los errores, este puede ser uno de los últimos ciclos. Tal vez el definitivo.

Esa historia también puede estar lejos, nadie quitará, con lo caprichoso que soy, que mis prejuicios superen mis necesidades afectivas.

En otros capítulos de la historia no queda más que reflexionar sobre lo que se hizo mal con Diana para no volverlo a cometer. De la misma forma que alguna vez Natalia me dijo: "Somos el resultado de todas las personas que amamos. Y me da rabia saber que para la persona que venga después de mí guardarás todas las cosas que a mi no me has dado, la tratarás de las buenas formas que yo te enseñé. Y yo, Felipe yo, Natalia Ortega también me llevo lo mejor de vos. Ahora que me has enseñado todo esto tan hermoso".

Y las palabras de Natalia se hicieron realidad. A Diana le tocó todo lo bueno y lo bonito que podía dar, no le tocaron los problemas de antes, ni las indecisiones que con paciencia Natalia moldeó en mí. A otras personas les tocará un Felipe más comunicativo, más expresivo y más cariñoso. Eso me lo ha enseñado Diana, y si bien no tuvo la claridad de Natalia, creo que me ha hecho una mejor persona. Salud por Diana, y porque no me dejó aprender en su escuela, pero me ha dejado sembrada la opción... lo aprenderé en otra parte.

Y ahora recuerdo cuando por una indecisión estuve a punto de serle infiel a Natalia. Y con todo lo sabia que fue me enseñó que esa no era la forma de hacer las cosas. El resultado de eso fue que nunca propicie un encuentro, un amor, una aventura mientras estuve al lado de Diana. Y hoy esa es mi carta de presentación. Sé que sólo necesito de una persona para sentirme bien.

Pero tengo otras cosas por corregir. A quien venga ahora le tocará el resultado de un Felipe que se ha moldeado en un crisol doloroso y feliz.

De la etapa del rompimiento prefiero no hablar, sería culpar a Diana y creo que ya lo he hecho y no es necesario volver sobre esos pasos. Sobre todo ahora que parecen a años de distancia.

Con la última etapa he de decir que estoy más cerca de la orilla a la que voy, que aquella de la que vengo, y que si bien nadie me está esperando en la playa seré feliz de tocar de nuevo tierra firme.

Finire

No hay comentarios.: